La magia de casarse en secreto

¿Alguna vez has tenido la breve sensación, cuando miras a tu pareja a los ojos, de que no quieres esperar ni un minuto más para empezar una nueva vida juntos y para siempre? Estos consejos que hoy te damos en Miboda.com son para esos soñadores, esas personas apasionadas e impacientes que no serían capaces de esperar un largo año de preparativos de boda para pronunciar el “sí, quiero” y que son tan celosos de su propio amor que no quieren compartirlo con nadie más. ¿Te animas a casarte en secreto?

Casarse en secreto tiene muchas ventajas. Es más espontáneo, pues ese subidón de la petición de matrimonio sigue todavía presente en el momento del enlace. Te evitarás algún que otro quebradero de cabeza decidiendo a quién invitar porque es lo que deseas y a quién convidar sólo por compromiso. Será una experiencia muy divertida y original. Pero plantéate también los contras que conlleva: el proceso de preparación es apasionante, precioso, y te lo perderás. Por otra parte, tu familia cercana no estaría allí y alguien podría sentirse ofendido. Si a pesar de saber esto, los pros siguen pesando más para ti que las desventajas, sigue leyendo nuestros tips para tener una boda coqueta en un tiempo exprés.

Lo primero que debes saber es que ni siquiera un matrimonio secreto puede ser cien por cien improvisado: ya sea por lo religioso o por lo civil, debéis marcar legalmente una fecha con antelación (aunque sería romántico, no podéis ir allí cualquier día y que os casen). Necesitaréis a dos testigos, que pueden ser vuestros padres, por ejemplo, de modo que evitaríais el problema de que vuestros seres queridos más importantes se ofendiesen.

Este tipo de enlace es más informal, con lo que vuestro atuendo ha de ser especial pero tampoco demasiado ostentoso, o se perdería la magia del momento. Debéis ir cómodos con vuestro propio estilo. Eso sí, la novia puede y debe hacerse un peinado y un maquillaje diferentes. Acude a la peluquería para que te hagan unas ondas desenfadadas o un semi recogido sin apenas accesorios. Maquíllate tú misma en casa. Para obtener un rostro saludable y luminoso emplea la técnica del strobing, y si quieres algo sencillo y rápido mezcla productos que juntos son mejores que separados, como la hidratante con la base o el bálsamo con el pintalabios.

Te sugerimos también que lleves un vestido sencillo y naif. Una boda de este estilo es perfecta para personas jóvenes que no tienen el tiempo ni el dinero para organizar algo grande. Por eso inspírate en vestidos de novia low cost idóneos para millennials, como los de la colección bridal de Asos. Se aplica lo mismo al novio: no hace falta que vaya con un riguroso frac o chaqué. Es más adecuado un look de traje y camisa desenfadado, con complementos originales para hombre.

Cuando seáis, al fin, marido y mujer, no vayáis al restaurante más caro de la ciudad, sino al sitio que más signifique para vosotros, incluso aunque éste sea un antro cutre de comida rápida. Haced algo personal, digno de contar a vuestros nietos. Id a un bar de la playa o a una tasca de comida casera, de toda la vida, en medio del campo. Reíd y haced vuestro propio vals nupcial en la naturaleza, con el cielo y la tierra como únicos espectadores.

Convertid la usual luna de miel planificada al milímetro en un viaje de aventura, como un símbolo del nacimiento natural de vuestra nueva etapa juntos. Coged un coche e id vagando sin rumbo fijo a ciudades que siempre quisisteis visitar pero nunca os atrevisteis porque había mucho trabajo y poco dinero. Descubríos el uno al otro no sólo como marido y mujer, sino como compañeros de breves itinerarios de carretera y de un eterno viaje en la vida.